Los mejores equipos son aquellos que forman una unidad y que todos trabajan en conjunto para conseguir unos objetivos comunes. Un buen equipo no se crea al azar, siempre hay un líder que coordina y se encarga de gestionar el equipo, y que genera ese ambiente.

El líder cuenta con las habilidades sociales necesarias para llevar a las personas en la dirección adecuada y consigue entregar proyectos dentro del plazo y del presupuesto.

Habilidades comunicativas

El líder debe tener buena capacidad de comunicación. Debe saber comunicar las metas del proyecto, transmitiendo con efectividad la visión y el entusiasmo para que se comprometan a cumplirlo.

Si el líder es capaz de tener una buena comunicación dentro del equipo:

  • Logrará crear un buen ambiente de trabajo.
  • Entenderá las necesidades de sus empleados de sentirse útiles y necesarios.
  • Logrará transmitir correctamente todas las instrucciones, señales, mensajes, etc.
  • Podrá obtener un feedback adecuado de su equipo.

Habilidades motivacionales

Conseguir motivar es es una de las habilidades más claves de un líder. Existe dos tipos de motivación que debe tener en cuenta.

  • La propia motivación. Tiene que tener claro sus objetivos e ilusiones para lograr estar en su mejor estado anímico para enfrentarse al trabajo.
  • La motivación de su equipo de trabajo es vital. Si el líder tiene un buen estado de ánimo, será capaz de transmitirlo y comunicarlo al resto del grupo y logrará que desencadene la misma actitud.

Capacidad de empatía

El líder debe ser capaz de ponerse en el lugar de otras personas. Tratar de entenderlas y ayudarlas cuando lo necesiten.

De esa forma, también conseguirá ser mucho más comunicativo y motivador.

Habilidad de reacción

Otra de las competencias necesarias es la habilidad de reacción. En un proyecto irán surgiendo muchos problemas muy diversos. Entre ellos, nuevas instrucciones, necesidades de última hora o un empleado desmotivado.

A pesar de esto, un buen líder siempre sabrá tomar las mejores decisiones para salir adelante de la mejor forma.

Capacidad de adaptación

Durante el proyecto, siempre pueden surgir cambios de última hora, cambios entre su grupo o nuevas incorporaciones, necesidades que no estaban previstas, etc.

En este sentido, el líder debe demostrar en todo momento una enorme seguridad y reaccionar a las condiciones entrantes con firmeza. Eso hará que el grupo gane confianza en él.

 

Concluyendo, éstas son las competencias que debe tener un líder para gestionar el equipo, además de saber optimizar sus resultados logrando los objetivos planteados con éxito.